El orégano, ingrediente común de las pizzas y de muchas salsas italianas, ha sido estudiado durante décadas por sus diversos efectos beneficiosos para la salud.
Ahora, un nuevo trabajo de investigadores de la Universidad Long Island (EU) ha dado un paso más al demostrar que un componente de esta especia podría usarse para tratar el cáncer de próstata, uno de los tumores masculinos que más muertes causan cada año.
El cáncer de próstata comienzan en la glándula prostática, y los expertos estiman que será la causa de la muerte de 1 de cada 36 hombres que viven hoy en el mundo. Actualmente se trata con radioterapia, terapia hormonal, quimioterapia y cirugía, que en unos casos son terapias invasivas, con posibles complicaciones, y en otros causan efectos secundarios indeseables.
Supriya Bavadekar, coautora del estudio, parecen haber hallado una alternativa en el carvacrol, componente del orégano. Sus trabajos revelan que esta molécula induce apoptosis, es decir, muerte celular programada o ‘suicidio celular’ en las células tumorales de la próstata.
«Sabíamos que el orégano tiene propiedades anti-inflamatorias y que actúa como antibiótico, pero su efecto en las células cancerígenas coloca la especia en la categoría de ‘superespecia’. Algunos científicos habían demostrado que comer pizza reducía el riesgo de cáncer, pero se solía atribuir a la salsa de tomate, que contienen licopeno», explica la doctora Bavadekar.
Fuente de energía
Otros estudios realizados en Estados Unidos revelan que la pizza contribuye al 6% de la ingesta total de energía en niños y el 4% para adultos. En el día que se consume, la pizza es fuente de aproximadamente el 27% de la energía total entre todos los consumidores.
La ingesta media de energía de la pizza es de 538 kilocalorías para los niños y 744 kilocalorías para los adultos.
El problema no es la pizza, sino el abuso de la pizza, es un alimento muy calórico.
¿Tiene nutrientes?
La pizza es un gran contribuyente de nutrientes en la dieta estadounidense, pues ofrece altos porcentajes de la ingesta total diaria de proteína, grasas, grasas saturadas, fibra, calcio y licopeno.
De acuerdo con el informe, este alimento representa un tercio de la ingesta total de calcio en un día y más de la mitad de licopeno, un micronutriente que -según varios estudios- es beneficioso para la salud.
Además, el plato es fuente de sodio, tanto en niños como adultos. Y como cereal, aporta nutrientes y micronutrientes que también son válidos.